jueves, 1 de diciembre de 2011

Sin voluntad


Soy el amante de un Lucero,
Al que le hago el amor con palabras,
Con ella el tiempo de amar se hace eterno.
en nuestro clandestino encuentro
 susurro a su oído mi fuerte anhelo,
Despacio corro su velo
Y el leviatán despierta
Para sacudir su alma, su cuerpo
y hasta el mismo cielo
Me escapo del mundo y vago en sus senos
Hasta que la vida eterna 
brota como manantial de su lecho
Con su cuerpo desnudo, su afinada lengua
bordeando mi garganta erecta
Una aventura sin límite ni gobierno

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